Colombia | Marcha por la dignidad y por la vida evidencia graves problemáticas en comunidades


| Por: Radicales Libres de Colombia |

En el decimosexto día de la marcha por la dignidad y la vida, se recordó, en el marco de la actividad política a partir del arribo de la marcha a la carrera 13 con calle 36 de Bogotá, que luego de 16 días marchando desde la ciudad de Popayán, llegaron finalmente a la plazoleta de ECOPETROL, acompañados además por organizaciones sociales y populares que les acompañaron y organizaron el recibimiento, en donde se encuentran encadenados compañeros trabajadores de ECOPETROL.


En este acto de resistencia se denuncia la posible venta total o parcial de la empresa de parte del gobierno Nacional, quien ha planteado la venta de activos, entre los  años 2021 y 2022, por un monto de 18,5 billones de pesos, supuestamente para financiar el presupuesto y los gastos que se le puedan presentar, sin que haya precisado cuales serían las empresas que se propone enajenar, a más de ECOPETROL, en el marco de una crisis y de pandemia, que hoy por hoy, tiene los precios del crudo a niveles bajos y que seguramente permanecerán así durante varios años, llevando en el caso de ECOPETROL, a uno de los negocios menos favorables para el Estado Colombiano

Una proclama del movimiento “Hambre y pobreza” que circula a la par de la marcha por la dignidad y la vida, entre otras señala “Levantamos la voz para decir lo que todo el país sabe desde el 21 de Noviembre del año 2019, que solo una gran unidad y acciones políticas conjuntas de todas las formas organizativas colectivas, sectoriales y comunitarias, que buscan mejorar las condiciones de vida de las gentes de este país, puede intentar parar, la intención de descargar los costos de la pandemia y la crisis del capital, sobre los hombros de los trabajadores del país”.

También se recordó en la Plazoleta de ECOPETROL, de parte de uno de los marchantes llegados desde Popayán este día, cual fue inicialmente la propuesta de “marcha por la dignidad y por la vida, de Popayán”, según fue comentado por José Milciades Sánchez, “una idea solitaria que cogió forma, planteada desde el desespero, la decepción que en este país no pase nada y que maten en el día a día,  líderes sociales, defensores de Derechos Humanos, Mujeres, y entonces se volvió paisaje la noticia, sin que nos sorprenda que maten una persona; en este país la vida no vale nada, para este gobierno, la vida no vale nada”. 


Otra vez, la proclama de “Hambre y Pobreza” titulada “a la calle a avanzar”, nos recuerda que “Desde todos los rincones del país, se desatan las luchas que se libran en los diversos territorios por parte de los procesos de resistencia urbanos y rurales, los cuales persisten en medio de esta salvaje arremetida del gobierno duque y la oligarquía, contra la vida humana desde múltiples esquinas, la aniquilación física, la aniquilación social y económica implementando reformas económicas y sociales que pretenden arrancar los derechos laborales y sociales que aún existen, las iniciativas que agreden las posibilidades de vida de las futuras generaciones mediante la agresión directa al agua y los bienes estratégicos del país, la muerte decretada a la educación y al pensamiento diferente. Acciones de exterminio encabezadas por el estado, el gobierno de duque y su partido el Centro Democrático y su gran alianza narcoparamilitar”.

Dirigiéndonos nuevamente a la plazoleta de ECOPETROL escuchamos ahora “La propuesta inicial”, continua argumentando Milciades,  “era salir caminando desde Cali a Bogotá, con la bandera de “NOS ESTAN MATANDO”, pero la propuesta fue abrazada por el Sur Occidente Colombiano; allí, el Cauca, sitio de la resistencia de Colombia, sitio más atacado y violentado en los Derechos Humanos, donde matan más líderes y lideresas, día a día, allí el suroccidente abrazó la propuesta, e inicialmente más de 40 organizaciones la acompañaron y ya la propuesta dejo de ser individual y se convirtió en propuesta del pueblo Colombiano. Fuimos entonces caminando la palabra, recogiendo el reclamo de las comunidades, la comunidad negra reclama al gobierno nacional la no reforma de la consulta previa; el campesinado exige y reclama la sustitución de cultivos de uso ilícito, puesto que el campesino no es narcotraficante y también reclama el cumplimiento de acuerdos firmados; caminando la palabra, también escuchamos a Duverney Marin Martinez, miembro del consejo Departamental de los Comunes, del partido FARC en el Departamento del Cauca,  uno de los firmantes de los acuerdos de paz con el Gobierno, de una zona Veredal, reclamando el respeto a la vida, porque no puede ser que hayan dejado las armas confiando en un gobierno mentiroso, que hoy ha asesinado a cientos de firmantes del acuerdo”.



“Recogimos también el dolor en las ciudades, porque no puede ser que la corte suprema de justicia haya reglamentado el suspender desalojos en el marco de la pandemia, y sin respetar lo ordenado por la corte, siguen habiendo desalojos y siguen abusando de las gentes. También estamos exigiendo el cese del asesinato de mujeres y el irrespeto de las niñas y niños en los territorios y le reclamamos a la Fiscalía que siga siendo cómplice de los perpetradores y que con argumentos falaces pretendan señalar que una niña ha seducido a siete militares; caminando la palabra, invitamos a la rebeldía, a la desobediencia civil y hoy retamos a este gobierno y caminamos en el marco de la pandemia” ha puntualizado Milciades.

Retomamos la proclama y podemos leer que “La pandemia no ha sido impedimento para continuar con los asesinatos y los desplazamientos en el territorio, también ha quedado al desnudo lo precario de la política social, que focaliza la atención entre los más pobres, si posibilitar salidas de la condición de pobreza. La cuarentena ha obligado al establecimiento de planes de ayuda, por parte del gobierno, insuficientes, precarios y de alcance limitado, los sectores más desprotegidos, los trabajadores informales, se han quedado sin ningún tipo de protección en medio de la pandemia

Mientras cientos de miles de trabajadores perdían sus puestos de trabajo, y miles de pequeños negocios se van a la quiebra, Los salarios caen, aumenta la concentración de la riqueza y crece la miseria y la desigualdad, Las primeras acciones tomadas frente a la crisis económica y la pandemia, fueron asumidas por el banco de la república, dando liquidez por más de 60 billones para salvar a los bancos, de sarmiento Angulo del grupo Aval, el grupo empresarial antioqueño GEA, dueños de Bancolombia y la familia cortés, dueños de Davivienda”, señala la proclama.

Desde el día 25 de junio empezamos a caminar la palabra, a la fecha de hoy son 16 días, señala ahora Duverney Marín, en la plazoleta de ECOPETROL, agregando que fueron muchos los motivos que rebosaron la copa para arrancar a andar por calles, vías, caseríos, pueblos y ciudades de Colombia, para dar a conocer a lo largo y ancho lo que realmente está haciendo este gobierno narco-paramilitar mafioso y corrupto. Para nadie es un secreto que el 24 de noviembre del 2016, se firmaron los acuerdos, pactados con la Extinta FARC, con el gobierno de Santos, con la responsabilidad de que el que llegara, los acuerdos se deberían de cumplir, fuera el que fuera, ni una coma más, ni una coma menos. A la fecha de hoy, este gobierno de Iván Duque, se ha dedicado, única y exclusivamente es a atacar los acuerdos, a pisotearlos, a volverlos trizas por todos los medios. Cuando hablo así, apuntilla Duverney, es porque los acuerdos están siendo atacados por la línea política, económica y jurídica; así es que a la fecha de hoy, van 216, hombres y mujeres firmantes del acuerdo de paz, asesinados, a lo que se suman desplazamientos forzosos en varios Departamentos del País. En el Departamento del Meta, Municipio de la Uribe, Vereda el Diamante, les toco a 20 hombres y mujeres firmantes del acuerdo de paz, salir desplazados, dejando sus proyectos; la historia se ha repetido en el Departamento del Tolima y en el Departamento del Cauca, Municipio de Miranda, Vereda Monte Redondo donde se encuentra ubicado un espacio territorial de capacitación y reincorporación ETCR, en donde un grupo armado que creemos no es aislado del estado, amenazo a la directiva de la junta y a la comunidad en general, señalándolos como objetivo militar y estableciendo un plazo para abandonar la zona de continuar conectados con un proceso de reincorporación económica, social y comunitaria de quienes se hayan comprometidos con la paz. En el mismo departamento del Cauca, la situación se ha repetido en otras dos zonas. En el Departamento de Antioquia, en Frontino, Ituango y Urrao.



Los dineros del fondo de paz, creado en el año 2017, para el desarrollo social de la reincorporación territorial y comunitaria, en el marco de negociaciones de paz y dejación de armas de grupos insurgentes, han venido siendo atacados por el presidente Duque al cogerse $ 3. 350. 000 millones con destinación a cosas diferentes, añade Duverney. Por eso, hoy desde esta marcha le decimos al Presidente Duque, que exigimos se pare el asesinato de los firmantes de la paz y de los líderes sociales y que se implementen los acuerdos para beneficio de todo el pueblo colombiano.

El mensaje de la mujer, en la marcha por la dignidad y la vida, tampoco ha estado ausente, para quienes los kilómetros caminados no ha sido ningún cansancio y muy por el contrario, el cansancio está asociado a otras causas, es el cansancio de la violencia, es el cansancio de los despojos, el cansancio de la violación de nuestros derechos, violación de todos los derechos, en el tema laboral, en el tema de la salud, la educación, también la violencia de los despojos en los territorios, la violencia de la militarización de nuestros territorios, la violencia en contra de la mujer cada día suman más a la lista de feminicidios, de violaciones, y no es justo, reclamamos y exigimos que haya justicia, para todos los actos que violan las mujeres

María Fernanda Cabal, una mujer que no nos representa, una mujer que representa el odio contra la sociedad, una mujer que no debe estar en donde está, porque representa esa violencia, esa destrucción, esa exclusión, que a las mujeres nos hace vulnerables; no es justo que hoy la fiscalía, siga acumulando procesos de violación y no pase nada; hoy hacemos exigencia, que en medio de esta pandemia no podemos seguir callando, no podemos seguir quedándonos en las casas, no podemos seguir permitiendo que estos tapabocas, nos silencien; tenemos que salir a las calles a exigir, no podemos seguir quedándonos en las casas sin garantías, cuando no tenemos alimentos para nuestra familia y nuestros hijos, cuando nos están echando de nuestros trabajos, sin derechos, cuando se nos violan nuestros derechos a la salud porque no podemos acceder a ellos, porque hoy la educación es virtual y en el campo no hay forma de que nuestros hijos, niños y jóvenes puedan estudiar; no es justo que sigamos siendo víctimas del conflicto, porque cuando se firmó el acuerdo de paz era para darle solución política a este tema de violencia  y hoy la violencia se ha entrometido en los territorios, hoy están militarizados sin que sea suficiente, por el contrario, se ha agudizado el conflicto, hoy muchos de los marchantes del cauca somos víctimas del conflicto, hemos sido amenazados y por eso salimos a las calles, damos ese motivo de movilización, porque la dignidad no la podemos perder, es lo único que tenemos y es lo único que tenemos que rescatar.

Por su parte, la proclama de “hambre y pobreza” nos señala que “La crisis económica y la pandemia han evidenciado la fragilidad del modelo neoliberal y el capitalismo y que la posibilidad de supervivencia del mismo está anclada al control que ejercen las pocas familias ricas, dueñas de las grandes empresas, capitales, bancos, grandes extensiones de tierra, contratistas parásitos del estado, parásitos de los recursos públicos en beneficio de lo privado, empleando en este tiempo el miedo y la amenaza a la población como mecanismo de control social y ante los requerimientos de alimentos de atención médica y recursos económicos para enfrentar la crisis económica y la pandemia, la respuesta del gobierno nacional y las administraciones locales ha sido la represión

Es inaplazable y necesario exigir y desatar la movilización conjunta que permita detener las acciones de muerte en todos los sentidos, a la vez que población protege su vida de manera segura en medio de la pandemia”, puntualiza este aparte de la proclama.

No tenemos miedo, agrega otra mujer que interviene, estamos mamados, el estado no solamente nos persigue, no solo nos está violando, también nos asesina y ahora también nos judicializa y no tenemos miedo de denunciar la complicidad de los militares en el asesinato de nuestros campesinos y campesinas, nuestros líderes y defensores de derechos humanos, por eso salimos a las carreteras, pues no pueden pretender, como ellos quieren, escondernos en las veredas de este país, y desde las montañas de Colombia, desde Arauca y desde el Sur de Bolívar tenemos pensado salir el 13 de julio, desde los dos sitios en simultaneo y encontrarnos el 19 en el puente de Boyacá, para finalmente el 20 de julio, hacer nuestra entrada a la ciudad de Bogotá

Los estudiantes también representados en la marcha por la dignidad dicen estar en la búsqueda de una educación pública gratuita a cargo del estado, donde se intensifique el pensamiento crítico, en donde haya garantías para que etapas como las que estamos pasando en la sociedad actualmente, todos puedan recibir la educación pública, porque hay estudiantes que viven en situación socioeconómica crítica y no hay garantías para su estudio. Es por ello que levantamos la bandera de gratuidad de la educación pública sin distinción de estrato o clase social, entre muchas otras.

No estamos todos, aquí faltan muchos, reivindicamos, entre otros, los procesos de los presos políticos, porque los presos sociales y políticos, también son vulnerados en sus derechos, ellos también son masacrados, como lo pudimos evidenciar trece días después de decretada la cuarentena en Colombia, con la masacre en la cárcel nacional Modelo de Bogotá en donde 23 reclusos son asesinados inmisericordemente con escusas falaces de supuestas fugas.     

La última información relacionada con la actividad de denuncia que hacen los trabajadores de ECOPETROL en la plazoleta de la calle 36 con carrera 13 en Bogotá, la ha dado a conocer la abogada de la Unión sindical Obrera USO, Liria Manrique, asesora de la secretaria de derechos humanos, informando que en los últimos días han estado tratando de establecer interlocución con la alcaldía de Bogotá, buscando evitar se cumpla una advertencia que hicieron desde la secretaria de seguridad, en la que dicen que a partir del 13 de julio, momento en que entra a regir la cuarentena obligatoria y estricta, las personas que se encuentran en la plazoleta en el machín de la resistencia, serán desalojadas. La respuesta de la secretaria de gobierno ha sido la de una negativa tajante al dialogo, diciendo que trasladara toda la facultad a la policía. Hablamos entonces de una violación flagrante al derecho humano a la protesta social.    

A partir del día 11 de julio, compañeros del cauca marchantes de la dignidad y por la vida, nos estarán acompañando a los territorios y particularmente a Soacha, Ciudadela Sucre en horas de la mañana y en las horas de la tarde, al parque la conejera en Ciudad Bolívar; el día domingo 12 de julio, durante el día, se estará en la localidad de Usme, conociendo las problemáticas de esta zona periférica de Bogotá.