La corporación Cortolima, la servil negacionista


| Por: Luis Orlando Ávila Hernández* |

El Cambio Climático, así con mayúscula, no es una idea vaga o un mentís científico, es una realidad que nos marca el cercano final de nuestra idea de paisaje continental y marítimo que hasta hoy conocimos, pobres y ricos, socialistas y capitalistas.

Naciones Unidas, redactó y publicó un informe con base a hechos científicos que  pudieran hacer estremecer a las sociedades mejor informadas, que no es nuestro caso en el Tolima, en el cual se exige limitar a 1,5ºC el calentamiento global en la próxima y fatal década: Informe sobre el Clima del IPCC 2018

Los Estados Unidos de América, alias los USA (gobernada por un payaso empresario capitalista al cual están a punto de derrocar y que desconoce adrede y burlescamente al señor ese que dice que es presidente de Colombia) y la República Popular de China, alias China (donde recientemente ese señor del cual se burlan los gringos y que dice ser presidente de Colombia, hace una semana oró arrodillado, sin  que nadie se lo pidiera, ante la tumba de Mao Tse Tung, el comunista), entre otras muy pocas naciones, NO RATIFICARON en 2018 (Ratification, Acceptance(A), Approval(AA), Accession(a)las cuatro únicas acepciones diplomáticas que da a los acuerdos multilaterales su carácter vinculante) el Acuerdo 7º de 12 de diciembre de 2015, conocido como el Acuerdo de Paris, sobre mantener en 2ºC el calentamiento global hasta limitarlo a 1,5ºC con respecto a los niveles preindustriales, es decir antes que fueran potencias USA y China.

USA:         al día  3 de Septiembre de 2016, casi tres años atrás, solo lo aceptó:
Que es decir, si existe pero no me importa, me da igual.
China:       igualmente al desfasado día 3 de septiembre de 2016 de su socio capitalista, le bastó una declaración, que no es ratificar ni menos aceptar:
Declaración:        De conformidad con la Ley Básica de la Región Administrativa Especial de Hong Kong de la República Popular de China y la Ley Básica de la Región Administrativa Especial de Macao de la República Popular de China, el Gobierno de la República Popular de China decide (solo les bastó decir “únicamente”) que el Acuerdo se aplica a la Región Administrativa Especial de Hong Kong y la Región Administrativa Especial de Macao de la República Popular de China.

¿Pero que carajos importa al Tolima  lo que China y USA hagan o no con el Acuerdo de Paris de 2015(en chino, francés, inglés y castellano), es decir con ratificar bajar el calentamiento a 1,5 y no a 2,0 grados Celsius?   

Mucho. Y mucho es mucho.

La poderosa e injerencista USAID (Agencia para la ayuda internacional de los USA), vinculada estrechamente a sus agencias de espionaje, militar y de vigilancia orwelliana, según lo dijo Eduard Snowden su ex agente de inteligencia hoy refugiado en Rusia, tiene tanto poder actualmente en el gobierno de la corporación Cortolima y en el mismo gobierno del departamento del Tolima junto al de los de sus 47 municipios, incluida la misma ciudad de Ibagué dizque gobernada por un socialista caballero francés afín a la negación del holocausto armenio, que acá se replica literal lo que les enseñan (ordenan) en sus cartillas de gobierno o eufemísticamente “gobernanza” (superestructuras de poder) con el mote pintoresco y engaña bobos de “política pública”.

Al punto que no se produce o se regodea, mercadea nada agropecuario de lo que se produce entre las memorables desaparecidas ferias agropecuarias, muestras, ágapes o simplemente banquetes hoy chicaneramente llamadas Féstival así tildadas, agringadas, porque nuestros festivales son anacrónicos, “out”, nada que ver, incluso hasta para los mismos cafeteros socialistas negacionistas de la matanza armenia, sin llevar el respectivo debido visto bueno de la USAID y de su elite de compañías tostadoras y de traficantes de café desde los países más pobres, que como sucede en la coca a la cocaína, desde el café con mucilago hasta al grano tostado, varia de centavos a miles de dólares, en las “justas” manos de “jurados expertos”, obvio escogidos o entrenados por la misma USAID, para castigar al desobediente incumplidor campesino de su calidad impuesta.

De la China comunista, donde se arrodilló sin que se lo pidieran ese señor que dice gobernar a Colombia, con sus miles de USAID en mandarín, al socialista alcalde de Ibagué con su cohorte de técnicos en solapas, junto a la clase de godos uribistas terratenientes que le critican, les une inequívocamente en su afán capitalista, una razón: la fe ciega en el gobierno Chino con sus millones de dólares en inversión y “cooperación” para canjear por la poderosa nación tierras y aguas de estas comarcas, donde puedan traer a comerciar o a Féstivalizar, así tildada, agringada, a sus más de 100 millones de expertos, ricos y colonizadores agricultores que su giga hidropresa de la Tres Gargantas y la polución de sus agroquímicos falseados les deja sin tierras propias donde “invertir”, The AtlanticChina ha lanzado el proyecto de tubería de agua más grande de la historia”, marzo 7 de 2014:

Entre hoy al 2040, se espera que la demanda total de energía de China sea más del doble, y sea el doble que la de los Estados Unidos. El Banco Mundial ha puesto el costo anual de los problemas de agua de China, específicamente, la escasez de agua y los impactos directos de la contaminación del agua en 2.3 por ciento del PIB, pero dice que es probable que sea mucho más alto. Alrededor del 45 por ciento del PIB del país proviene de provincias con escasez de agua, según un informe de 2012 de HSBC y China Water Risk.

Pero bueno, al punto.

La corporación Cortolima, que se autodenomina autoridad ambiental, recibe directa e indirectamente “ayudas” de la USAID gringa y de las miles de USAID chinas.
Bien, pero ahí no estaría el problema.

Lo difícil ocurre, cuando la corporación alias la autoridad ambiental, sigue el libreto de sus donantes.

Con la premisa que de científicos está plena y propiamente vacía, carente, y a cambio está llena, rellena de abogados, de ingenieros forestales graduados de abogados, de biólogos graduados de abogados, de alcaldes directivos graduados de abogados, de voceros de ONG graduados de abogados y de tinterillos con ansias de ser abogados, la corporación se pierde en su misma fetidez leguleya.

Por ello cuando desde 2017 hasta hoy el Jefe máximo de la USAID, la donante de la corporación Cortolima, el señor Trump hoy a punto de ser enjuiciado, decidió evitar usar el término “Cambio Climático”, así en mayúscula, y puso en su agencia ambiental EPA a un lobista de la industria carbonífera, ordenó a sus agencias propalar su pensamiento anti Acuerdo de Paris 2015 (The Financial Times, julio 11 de 2019).

Y bien, la receptora tolimense de donaciones colonialistas, la fétida autoridad ambiental de leguleyos: hizo ipso facto acatamiento, obediencia.

Al punto que en su vigente institucional publicidad radial (la cual se esparce a diario en todo el espectro periodístico politiquero de la Ibagué y el Tolima, en sus justas proporciones como diría el afortunadamente fallecido señor Turbay Ayala), orgullosa, niega.

Una, la más excluyente y ninguneadora de nuestra condición como región, la de una impostada voz cantinflesca del personaje doña “Ambiente” le pregunta al garete a la “autorizada” voz de un don “San Pedro” (religión y autoridad, diría don Walter Benjamín), éste sin dudarlo sacramente le riposta que es gracias a la “variabilidad climática” la culpable de sus calores e infortunios.

En otra, mediante la siempre efectiva infantilización de la sociedad tan útil a la “autoridad”, sea esta ambiental, religiosa o policiva, una voz de un imberbe riposta a la sacra voz masculina (la corporación se cuida de mantener el patriarcado como autoridad en sus mensajes radiales) cuál es su culpa por el fenómeno del “Niño”, éste en docta y leguleya sapiencia le increpa que es a la “variabilidad climática” que debemos nuestros actuales mefistofélicos destinos de desiertos y fracasos ambientales.

Pudiera decirse que con el dramatizado publicitario radial remoquete de “variabilidad climática”, dictado patriarcalmente a la caricaturizada “doña Ambiente” y al infantilizado imberbe, es la cuota Litis con la que abogados, sus émulos de otras cátedras vueltos abogados, sus tinterillos ONG ansiosos de abogacía, desde la secuestrada dirección de la corporación Cortolima pagan cada una de las donaciones recibidas a las USAID gringas y a las miles de USAID chinas afines a los socialistas negacionistas del holocausto armenio o palestino, para evitar la ira del señor Trump o del señor Xi Ping.

Cada director y su respectivo directorio de émulos leguleyos en la corporación Cortolima, por lo menos desde su creación en los 90, son la puerta giratoria del vasallaje y de la ignorancia científica hecha “autoridad”.

Sancionando a diestra y siniestra a cuanto cristiano desatienda sus doctos dictados dictados desde afuera, cuando no haciendo el imitar al circo Féstival (así tildado, agringado) de la preocupación por la “variablidad climática” para lo cual se presta, embrujan o incautan a mucho progre.

Pero lo suyo es el servil negacionismo del Cambio Climático, así en mayúsculas, en el afán de su proxenetismo trumpiano de su “variablidad climática” en minúscula, como minúscula es su moral, responsabilidad y ética social.

Por eso no tienen una, une o un solo científico ni siquiera tras su puerta de salida, ni menos un laboratorio que al menos examine las aguas putrefactas de su fetidez leguleya y servil al colonialismo mental, como sabe decir don Noam Chomsky.

¿Por qué al Tolima le llega y atiborra tanta plaga servil? 

No hay derecho (perdón si suena a leguleyada ambiental). 

Imagen de portada: Caricatura tomada del diario South China Morning Post, noviembre 29 de 2018.

(*)  Ingeniero agrónomo, propietario de la ex Tienda Cultural La Guacharaca